Los separatistas tienen demasiado asimilado que el resto de ciudadanos son tontos. Para las próximas generales, CDC retomará el nombre de CDC y desechará el rimbombante epíteto de Democràcia i Llibertat (DiL).
El retorno a CDC viene dado, según ha manifestado sin rubor su, en principio, cabeza de lista, por el convencimiento de que en los comicios del 20-D la gente no se enteró de que CDC era DiL y creyó que CDC no se presentaba a las elecciones y se desvió hacia otras opciones menos misteriosas. Para CDC la ignorancia de la gente es de un subido de tono alarmante.
Es un insulto a la inteligencia colectiva que se excusen con ese argumento para cambiar otra vez el nombre de la candidatura. La realidad es que adoptaron DiL porque pensaron que CDC era un producto en fase de obsolescencia, (ahora han rectificado esa apreciación) y probaron una artimaña que no funcionó y tratan de justificarlo alegando que el personal no se entera de nada y queda descolocado si le varían las cosas a las que está acostumbrado.
Queda demostrado que a los separatistas las probaturas no les funcionan, o no las analizan con la profundidad que las modificaciones requieren y ello precisamente les ocurre porque infravaloran a los ciudadanos, o es que se hallan inmersos en una empanada mental de mucho cuidado y de peligrosa envergadura: sabiendo que sus probaturas nunca alcanzan el éxito ni, por supuesto, consiguen el objetivo deseado (el plebiscito lo certificó), están empeñados (en catalán capficats) en trasformar un territorio legal y eficiente en un ente ilegal y no reconocido por ningún estado del mundo. La probatura se perfila catastrófica.
Para CDC los procesos electorales se han convertido en un problema. El mensaje público del señor Mas suplicando a ERC que aceptara montar un segundo JxSí para las generales del 26-6, fue desolador, turbador y ridículo. El hombre se ofreció para ocupar cualquier puesto de la lista conjunta, desde encabezarla a cerrarla. Hay espectáculos deprimentes. ¿Por qué quiere el señor Mas reducir el espectro plural del país y eliminar listas de la contienda electoral? Elemental, por experiencia teme a las elecciones y concurriendo a ellas acompañado el derrumbe quedará como más paliado.
Menos mal que los republicanos reaccionaron al instante y se negaron en rotundo a secundar la súplica televisada del señor Mas.
M. Riera
