
El Pleno de Moncada i Reixac aprobó el pasado jueves una modificación para actualizar el régimen de infracciones y sanciones en cuanto al vertido de residuos en la vía pública. Con ese cambio, las multas oscilarán entre los 90 y los 750 euros, en el caso de las infracciones leves; entre 751 y 1.500 euros, en el caso de graves; y entre 1.501 y 3.001 euros, en el caso de muy graves.
La Ordenanza municipal de medidas para fomentar y garantizar la convivencia ciudadana en el espacio público y reguladora del uso de la vía pública, aprobada en 2007 y actualizada en 2019, ha sido objeto de una modificación en relación a las infracciones y sanciones en materia de vertido de residuos. Este cambio, que se aprobó durante la sesión plenaria del 27 de octubre, se ha hecho a requerimiento de los responsables del Área de Espacio Público y Transición Ecológica del Ayuntamiento, que pusieron de manifiesto la necesidad de actualizar el régimen de infracciones y sanciones en cuanto a la materia de vertido de residuos ya que, por su naturaleza y características diferenciadas, es conveniente tratarlas de forma separada en el resto y, además, estaban reguladas con unos importes muy por debajo de los máximos que establece la ley del régimen local.
Por este motivo, la modificación de la ordenanza ha consistido, principalmente, en la redacción de un nuevo artículo específico para la regulación de las infracciones en materia de vertido de residuos, con la gradación de infracciones leves, graves y mucho graves y también de un nuevo precepto que establezca las correspondientes sanciones. Con ese cambio, las multas oscilarán entre los 90 y los 750 euros, en el caso de las infracciones leves; entre 751 y 1.500 euros, en el caso de graves; y entre 1.501 y 3.001 euros, en el caso de muy graves. Otra de las novedades es que los conductores de los vehículos que realicen el vertido de residuos serán considerados como los responsables de esta infracción. La regulación del resto de infracciones y sanciones que regula la ordenanza de convivencia y que no afectan al vertido y derramamiento de residuos, no experimentan ninguna modificación: leves, entre 90 y 120 euros; graves, entre 121 y 300 euros; y muy graves entre 301 y 600 euros. .
Durante su intervención en el Pleno, Juan Carlos de la Torre, concejal de Servicios Municipales y Espacio Público, destacó que el vertido de residuos provoca “un gran problema de convivencia, generando una sensación de deterioro del municipio que no es real”. “Creemos que este cambio en la ordenanza, totalmente necesaria, ayudará a controlar a la mínima parte de la población que no acepta las reglas del juego”, añadió de la Torre, quien también avanzó que uno de los objetivos para el futuro es que el vertido de residuos esté regulado con su propia ordenanza.
La alcaldesa, Laura Campos, cerró el punto elogiando la labor que la Policía Local realiza a la hora de controlar los vertidos de residuos, destacando que en lo que va de año ya se han abierto un total de 263 expedientes sancionadores de vía pública.