
La Audiencia Provincial de Barcelona ha impuesto una pena de 26 años de cárcel al hombre acusado de matar a la vecina de Granollers Vianca Roca: 24 por asesinato con alevosía y otra de 2 por maltrato habitual en el ámbito de la violencia.
El juicio se celebró con jurado popular, que a principios de octubre ya consideró al individuo culpable de asesinato por unanimidad. A este delito, el tribunal tiene en cuenta a los agravantes de parentesco y de discriminación por razón de género. Asimismo le prohíbe acercarse y comunicarse con el hijo, la madre y los hermanos de la víctima a una distancia de 1 kilómetro por un plazo superior en 10 años a la pena de prisión.
En el caso del delito de maltrato habitual en el ámbito de la violencia de género, el tribunal también establece prohibición de comunicarse y acercarse a menos de 1 kilómetro a las cuatro personas, en este caso por plazo superior en 4 años en la pena de prisión.
El hombre permanecerá en libertad vigilada durante 5 años después del cumplimiento de la pena privativa de libertad.
Además deberá indemnizar al hijo, menor de edad, con 300.000 euros, la madre de la víctima con 120.000 euros más 3.850 en concepto de gastos funerarios y cada uno de los dos hermanos con 50.000 euros.
Cabe recordar que el jurado popular consideró, por unanimidad, que el ahora condenado mató a la víctima sin que ésta tuviera la posibilidad de defenderse. Además, sostenían que tenía una actitud de “desprecio y superioridad” hacia la mujer y que, en varias ocasiones, le había maltratado físicamente.
Durante el juicio, ocurrido el 27 de septiembre, el hombre negó los hechos y aseguró que él nunca había agredido a la víctima, al tiempo que afirmaba que la expareja de la mujer le había amenazado más de una vez. También dijo que la mujer era narcotraficante.
Tanto el jurado popular como el tribunal han hecho suyo el relato de la Fiscalía, según el cual la noche del lunes 16 al martes 17 de julio del 2018 el acusado estaba junto a su esposa en la habitación donde convivían. Discutieron y el acusado se marchó del piso. Al cabo de un rato también lo hizo la mujer. Hablaron varias veces por teléfono y a las 2 de la madrugada se reunieron en algún lugar cercano al paseo fluvial de Granollers. Allí, el hombre mató a la mujer y escondió el cuerpo en un colector cercano a la orilla del río Congost.
La mujer, de 25 años y origen boliviano, estaba embarazada de dos meses, siendo localizada cerca de dos meses después, el 9 de septiembre, en avanzado estado de descomposición y con la cabeza separada y en una bolsa de plástico. El hombre fue arrestado casi un año después, a principios de julio de 2019.