La estructura del radar de tramo entre Aiguafreda y Tagamanent lleva ya un año instalada

En toda Catalunya, Trànsit tiene previsto instalar cinco radares nuevos este 2022. Dos de ellos estarán en el tramo de la C-17 entre Aiguafreda y Figaró ( en ambos sentidos). Los otros dos estarán en la N-II a la altura de Figueres (en ambos sentidos) y el de Masella en sentido Andorra.

Trànsit lleva tiempo preparando la puesta en marcha de los nuevos radares de la C-17 en el tramo que va de Aiguafreda a Figaró, pero el contexto global de falta de componentes lo ha evitado. El director general, Ramon Lamiel, ha asegurado este martes que prevén hacerlo este año.

De este modo, habrá dos nuevos radares: uno de tramo entre Aiguafreda y Tagamanent, a la altura de la empresa Leiro y uno fijo, que está instalado desde hace meses pero todavía no funciona, situado en la entrada del túnel del Figaró.


Por el contrario, el fijo de Aiguafreda, que en las últimas semanas ha provocado muchas quejas por la gran cantidad de multas impuestas, desaparecerá.


En lo que se refiere al situado a la altura del restaurante El Pinós, en la entrada de Aiguafreda, Trànsit prevé mantenerlo.

Tanto el Radar de Tramo entre Aiguafreda y Tagamanent como el radar del tunel del Figaró velarán por que la velocidad de la zona sea de 80 kilómetros hora.

Lamiel también ha explicado que la medida de circular a 80 por este tramo, muy criticada por los usuarios e impuesta por Territori, es favorable para minimizar los accidentes.

Ramon Lamiel ha explicado que la colocación de los radares se revisa a menudo para que sean de «utilidad», en el sentido de que reduzcan accidentes. «No tenemos ningún interés en poner multas», señaló. «Si no reducen la siniestralidad no nos interesan», añadió.