Hoy 2 mayo os quería escribir de una novela histórica que hace muchos años empecé y la tengo medio escrita, ya saben de mi pasión por la Historia, el 2 de mayo me es importante por una cuestión familiar …
Pero hoy quería hablar, como decía de una Historia del 2 de mayo que en Granollers fue en junio de ese año (1808) con motivo de la celebración del bicentenario de la gesta de la guerra de la Independencia que en Catalunya se llama La Guerra del Francés. El título será EL 2 DE MAYO EN EL VALLES porque la comarca se levantó unida para defender la capital. En julio de ese año tuvo lugar la derrota en Bailén del hasta ese momento invencible ejército imperial de Napoleón ahora muy popular en Francia por culpa del chauvinismo galo.
El propio emperador escribió en sus memorias que se arrepentía de haber atacado en dos frentes a la vez: al general invierno ruso y la aguerrida España donde perdió a 300.000 jóvenes imperiales. El principal de mi novela es un sargento real que era Otto, un prusiano al servicio del Emperador. La documentación la saqué de la hemeroteca municipal gracias al archivero municipal Lluis Tintó ya jubilado y un libro histórico de la Generalitat que hablaba de ese sargento prusiano. Nuestros antepasados de Granollers sólo tenían dos mil pero se portaron como unos valientes que sorprenderá a los vallesanos. También hablo de la batalla de Llinars-Cardedeu donde los migueletes, los soldados catalanes, del general Milans del Bosch no vencieron como el general Castaños en Bailén, Jaén.
Pero ayer uno de mayo pensé contar mi primera manifestación vivida el primero de mayo de 1976 en Sabadell pedida por un profesor de periodismo en la que vi a los grises cargaban contra los trabajadores
Pero ésta semana se ha cumplido el 35 aniversario del desastre radiactivo de Chérnobil y recuerdo de una portada impactante que me dijo el responsable municipal sanitario el señor Caballero (q.e.p.d). Me llamó para decirme que los militares de la montaña del Montseny habían detectado que la radiactividad no sólo había llegado a la Alemania federal sino también al Montseny, que en 1986 el alcalde era el socialista Rafael Ballús. El doctor no se llevaba bien con el alcalde, Mayoral tampoco, ni yo…
Roberto Giménez
