Roberto Giménez

Hoy quería escribir de otra cosa pero da la impresión que desde el 31 de Diciembre y hoy haya pasado un año. El factor subjetivo es determinante. Todo depende, como cantaba el malogrado jefe de Jarabe de Palo no por el puto virus Covid 19, porque el cáncer también existe.

Hoy les quería hablar de Historia porque algunos de mis lectores saben me encanta el periodismo y de la Historia local, conozco más la ciudad adoptiva (Granollers) que mi capital natal (Lleida), más del pasado de esa ciudad que muchos leridanos pese la capital con diecisiete años para trabajar y estudiar en Barcelona y desde 1977 en Granollers, soy un gato viejo…

El día de Reyes, Santi, un viejo amigo de Lleida me envió un viejo artículo de Manuel Vicens diciendo que España era el mejor país que se podía vivir. Creo que hoy no por la política helada, ha un frio siberiano física y metafóricamente aquí no un fondo blanco…

Sin embargo quiero hablar de la locura americana en la que setenta y cuatro millones de estadounidenses han votado a Donald Trump, y que un 45% está de acuerdo con la ocupación del Capitolio, los americanos siempre me han caído mal porque son hijos putativos mayormente de los ingleses. De niño iba con los indios…

Evidentemente hay más buenos que malos, gracias a Dios en todas las naciones ocurre, pero no me gustan ese complejo superioridad que tienen porque se creen los amos del mundo. Donald Trump encarna el lado negro de América, como Obama encarnaba el lado blanco de la primeria potencia mundial. Es el paradigma de esa mentalidad por eso tantos millones lo han votado, y desprecia a los que no…

Se equivocan quienes piensan que la Democracia no peligra porque lo hace en Hungría, Polonia, la Turquía de Erdongan y hasta la democracia más antigua del mundo (1776), la de Donald Trump, peligra como bien el mundo ha visto la tarde de Reyes ante el pasmo mundial. Todos nos hemos quedado pasmado ante tanta chulería de un personaje tan pobre que sólo tiene dinero…

Alemania cayó en los brazos del fascismo en 1933. Era el Estado más desarrollado del mundo. Hay que aprender del pasado si no quieres tropezar con la misma piedra. Marie Le Pen del Frente Nacional lo pretende en la nación que hizo la revolución francesa de 1789…

El populismo, ofrecer soluciones fáciles a problemas difíciles, y complica las cosas. La demagogia y la ignorancia, empobrece a las naciones. Alemania está avergonzada de lo que hizo en el siglo pasado, y obliga a sus niños saber lo que muchos de sus adorables abuelos hicieron…

En España tendríamos que aprender el cuento.

Roberto Giménez