Los Mossos tienen en marcha un amplio dispositivo para garantizar el confinamiento municipal que ha entrado en vigor este jueves en Cataluña y que se alargará al menos durante diez días, con el objetivo de frenar la transmisión de la Covid-19.
La policía catalana ha activado un despliegue con 258 controles en carreteras principales y secundarias de la red viaria, de día y de noche. El cuerpo policial se coordina con las policías locales con el objetivo de hacer comprobaciones selectivas a las entradas y salidas de las poblaciones. Además, también hay revisiones en los accesos de las estaciones de transporte público para garantizar que los desplazamientos se ajustan a las nuevas medidas.
Desde este jueves sólo se podrá salir de la localidad de residencia por motivos de causa mayor, como por ejemplo ir a trabajar, a estudiar, a un hospital o asistir a una persona dependiente. A diferencia del periodo navideño, no se autoriza salir del municipio -hasta ahora lo había sido de la comarca- para ir a una segunda residencia.