El Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias y el Ayuntamiento de Rubí han llegado a un acuerdo para que la ciudad acoja varios nuevos servicios dirigidos a niños, adolescentes y jóvenes en situación de vulnerabilidad. Se trata de un plan de atención a niños y jóvenes pactado entre las dos administraciones para abordar este colectivo con necesidades especiales de protección.
Por un lado, se pondrán en funcionamiento varios pisos para jóvenes emigrados sin familia de entre 16 y 21 años, de 4 plazas, repartidos por los diferentes barrios de la ciudad. Estas viviendas, ha informado el Ayuntamiento, están dirigidos a jóvenes que están aprendiendo el idioma, están haciendo formación laboral y trabajan para su emancipación.
Los pisos de jóvenes tutelados de 16 a 21 años -de como máximo 8 plazas- son servicios residenciales con equipos educativos dirigidos, en este caso, a jóvenes emigrados solos. «En estos servicios se pone especial énfasis en la acogida y el desarrollo de una red comunitaria y en el acompañamiento más allá de la mayoría de edad para garantizar la cobertura de sus necesidades y, especialmente, las oportunidades laboral y su regularización administrativa», explican desde la administración.
El acuerdo también contempla que se abrirá un nuevo servicio educativo de carácter residencial dirigido a chicas adolescentes y jóvenes embarazadas y a madres menores de edad con niños de 0 a 3 años que se instalará en el antiguo Hotel Terranova de 15 plazas
Este tipo de equipamiento tiene como objetivo mejorar las potencialidades y capacidades marentales de estas jóvenes para que puedan desarrollar su rol maternal de la mejor manera posible. También se trabajan hábitos saludables, capacidades laborales, oportunidades y retos para una vida autónoma y programas para promover el retorno a la familia, siempre que sea posible, en el momento de la salida de este recurso.
Tanto la Generalitat como el municipio de Rubí consideran que esta es la mejor solución para la ciudad ya que permitirá ofrecer a la ciudadanía un recurso básico de atención a chicas, a la vez que permite la corresponsabilidad entre ambas administraciones con la acogida de jóvenes emigrados solos.