
Desde el año 2005 hay constancia de que la nutria ha vuelto a los ríos de la cuenca del Besòs. Ese año se localizaron los primeros rastros en el Congost y desde entonces, los naturalistas y biólogos que estudian la cuenca, han ido reuniendo evidencias de la presencia de este mamífero. Sin embargo “las nutrias vallesanas” son esquivas y no se dejan ver con facilidad. Hasta el 2013 no se dejaron ni filmar ni fotografiar. Y además…muy de tarde en tarde. El último avistamiento dentro de los trabajos de seguimiento de la nutria realizada por técnicos y colaboradores del Consorci per a la Defensa de la Conca del río Besòs tuvo lugar en el término municipal de Lliçà d’Amunt. Se trata de una fotografía nocturna tomada con un sistema de fototrampeo escondido entre la vegetación la madrugada del pasado 19 de enero de 2016.
A partir de diciembre de 2013 se consiguieron las primeras filmaciones de la nutria en el Tenes. La primera fotografía se hizo esperar un poco más y no fue hasta el 6 de junio de 2014 alrededor de la una de la madrugada cuando finalmente se pudo fotografiar un ejemplar en el río Tenes, a la altura de Santa Eulàlia de Ronçana.
La primera filmación de un ejemplar de nutria fue conseguida por el biólogo y naturalista, Alfred Encuentra en Bigues i Riells.