La empresa de Caldes de Montbui OKOTEC Biogestión acaba de dar con la clave para acabar con el grave problema de los purines. La empresa vallesana ha diseñado y construido una planta para tratar purines de forma integral y que además tiene una importante característica: es movible. La planta, con el objeto de eliminar las deyecciones ganaderas, puede estar instalada en un lugar fijo o ser movible y poderse desplazar mediante un camión-remolque. Es decir supone una solución directa para las granjas o para grupos de ellas que quieran utilizar el sistema de forma rotatoria.
Según explicó su administrador-gerente, Antoni Banús, este sistema consiste en un tratamiento de filtración que convierte el purín en sólidos para comercializar, y agua. El líquido obtenido es un agua que se puede reutilizar para limpiezas, regar o ser vertida directamente al río.
Banus añadió que se trata de un tratamiento innovador “ya que elimina de forma total los purines”, y se divide básicamente en tres fases: separación de sólidos, eliminación de partículas, y una filtración que depura los líquidos hasta convertirla en agua, eliminando el nitrógeno y otras sales que contienen los purines.
La empresa aprovechará la celebración la próxima semana en Vic del Simposio Internacional sobre retos y oportunidades en la fertilización y gestión de las deyecciones ganaderas para presentar a los ganaderos y empresarios del sector esta planta que sirve para tratar purines de manera integral.
Los purines animales, una mezcla de agua, orina y excrementos, suponen un grave problema ambiental si no son tratados correctamente o utilizados adecuadamente como abono. Su alto contenido en nitratos provoca contaminación de los suelos y de las aguas subterráneas,