Revista Digital del Vallés, como su mismo nombre indica, es la versión digital de la extinta Revista del Vallés. Ha salido a escena seis días antes de lo previsto. Quería salir el 9N, por aquello de ser una fecha fácil de recordar cuando pasen los días, pero nació el día 3N por la impaciencia de sus dos promotores, que conocen bien a los antiguos lectores de Revista del Vallès, y los actuales de EL VALLÈS DEL S XXI: el periodista Jordi Abayá y el historiador César Alcalá.
La impaciencia estaba justificada: tenían todos los trámites legales en regla para poder arrancar. Jordi había sido el responsable de la edición digital de Revista del Vallès y tenía el dominio de su nombre. Así que con buen tino decidió salir con esa marca bien conocida en el mercado vallesano, y arrancar con un buen colchón de lectores que conservaban la marca con la etiqueta de Favoritos.
A nosotros nos viene de perilla por aquello de los vasos comunicantes. Cuatro ojos ven más que dos. El planteamiento es como el nuestro, pero desde la vertiente digital diaria: las noticias las publican en castellano porque no existe oferta digital vallesana en ese idioma. Cubren ese hueco. En catalán cuelgan los escritos y opiniones que les lleguen, pero las noticias no. Esta estrategia les lleva como consecuencia a otra: no son nacionalistas, ahora trocados todos ellos en indepes. Lo cual, faltaría más, no quiere decir que no vayan a informar de esas noticias. La información es la seña de identidad, tanto si gusta como si disgusta. El lector tiene derecho a ella. Por supuesto. Otra cosa distinta es la interpretación. No es lo mismo, verbigracia, leer El País, La Vanguardia o El Ara. Nadie falta a la verdad, pero difieren en su interpretación. Por eso cada lector elige la que le place más.
Vamos, esta Revista y ese digital son vasos comunicantes y complementarios, desde el punto de vista informativo.
