Francisco Barbachano
Por ser tradicional
es seguro que recordarán
los más viejos del lugar,
que el día de San Esteban,
se comían canelones
con las sobras de Navidad.

A la vuelta de la esquina
está el año que se va;
Año Viejo se le llama
para volver a empezar
el llamado Año Nuevo,
que, ojalá sea cabal.

¡Alerta!, es una palabra,
que hay que tener en cuenta.
Que en el mundo pintan bastos
que es un palo y no caricia
y hay que estar prevenido,
para evitar injusticias.

Así transcurren los años
que suman más y no menos.
Suman más para los jóvenes
y también para los viejos.
¡Feliz Año!, amigos míos,
con mis mejores deseos.

Francisco Barbachano