La UGT de Catalunya ha solicitado formalmente al Ayuntamiento de La Roca del Vallès el cierre temporal de las instalaciones deportivas municipales que presenten deficiencias susceptibles de poner en riesgo la seguridad y la salud tanto de las personas trabajadoras como de las usuarias. La petición llega tras la detección de incidencias graves y tras la apertura, por parte del propio consistorio, de un expediente disciplinario que el sindicato considera “sorprendente” y que, según denuncia, busca “desplazar responsabilidades políticas sobre la gestión”.

Según la organización sindical, la situación de desorden y falta de recursos humanos llegó a ser “insostenible”. En un caso concreto, un solo empleado debía supervisar hasta tres instalaciones deportivas al mismo tiempo, además de “formar y vigilar a personal contratado sin ninguna cualificación técnica en mantenimiento”, tareas que después debía corregir y compatibilizar con sus propias funciones. UGT afirma que este trabajador recibía llamadas constantes incluso en sus días de descanso, debido a la falta de personal y a una estructura del servicio “claramente insuficiente”. El sindicato asegura que el empleado había enviado múltiples avisos internos alertando sobre riesgos sin que se adoptaran medidas.

Entre las deficiencias detectadas figuran “la rotura de sillas en las gradas, fugas de agua, ausencia de redes de seguridad, porterías en mal estado, graves deficiencias de limpieza y griferías y lavabos averiados”, problemas que comprometerían tanto la seguridad laboral como la integridad física de los usuarios.

De la documentación del expediente disciplinario se desprenden, según UGT, “deficiencias organizativas que afectan directamente al funcionamiento seguro de las instalaciones”, así como una falta generalizada de personal cualificado, insuficiencia de medios materiales, “mala organización” y una vulneración grave de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.

Ante esta situación, la UGT ha presentado una nueva denuncia ante la Inspección de Trabajo por incumplimiento de la Ley 31/1995, solicitando “la intervención inmediata del servicio de prevención y el cierre de todas aquellas actividades que representen peligro”. El sindicato también exige al Ayuntamiento la entrega de toda la documentación relacionada con permisos y certificados de seguridad de cada instalación deportiva.

Esta es la segunda denuncia en pocos meses. En octubre, tras la información aportada por varios funcionarios, UGT ya denunció la ausencia de evaluaciones de riesgos laborales, la falta de medidas preventivas y diversas carencias documentales, incluida “la inexistencia de los protocolos de acoso laboral y acoso sexual, obligatorios por ley”.

El sindicato insiste en que “la seguridad laboral y la protección de la ciudadanía deben ser una prioridad inexcusable” y reclama al Ayuntamiento “una actuación inmediata, transparente y ajustada a la legalidad”. Además, reprocha al consistorio que pretenda “culpar a las personas trabajadoras por una gestión organizativa manifiestamente deficiente”.

“No se puede permitir contratar a personas sin formación, no proporcionarles la preparación necesaria, ignorar los avisos de la plantilla sobre la falta de medios y, posteriormente, intentar responsabilizar al empleado más vulnerable cuando se produce un incidente”, concluye la UGT.