En el Hospital de Granollers ya se ofrece la posibilidad de tratar a los pacientes de obesidad mórbida con cirugía bariátrica, aplicando las dos técnicas más frecuentemente realizadas a nivel mundial: el bypass gástrico en Y de Roux (procedimiento quirúrgico para la pérdida de peso que implica la reducción del estómago y cambios en el intestino delgado para disminuir la capacidad de absorción de los alimentos), y la gastrectomía vertical (intervención también llamada gastrectomía tubular, sleeve o manga gástrica), técnica que consiste en reducir el tamaño del estómago, quedando la parte útil como tubo o manga estrecho y largo, extirpando al otro lado. En el primer año de implementación de esta intervención, el Hospital General de Granollers ha realizado una treintena de cirugías, estimando un crecimiento progresivo en base a resultados.

Actualmente el paciente es derivado para valorar si es candidato a cirugía bariátrica desde atención primaria (u otros servicios del hospital) al servicio de endocrinología, donde se visita primero con el endocrinólogo/a. Después, todos los pacientes candidatos deben realizar el taller de educación sanitaria por obesidad impartido por nuestros dietistas, con la idea de que aprendan unos hábitos de vida saludables de alimentación. Asimismo, deben realizar un seguimiento posterior para iniciar una dieta antes de la intervención, para minimizar los riesgos quirúrgicos y perder peso antes, si es posible.

El endocrinólogo/a pide todas las pruebas y visitas necesarias para la cirugía, pero es el equipo multidisciplinar de profesionales quienes valoran la idoneidad del paciente para la intervención quirúrgica. Este equipo está formado por endocrinología, dietistas, cirugía gastrointestinal, psiquiatría y psicología, neumología, digestivo, anestesia y reanimación y otros servicios, dependiendo del cuadro médico del paciente.

Tras la intervención, el paciente continúa el seguimiento completo con los endocrinólogos y dietistas-nutricionistas del servicio. Se evalúa periódicamente el estado nutricional mediante antropometría y pruebas (peso, IMC, perímetros corporales y análisis de sangre, etc.) y las dietistas adaptan su alimentación progresivamente. Los endocrinólogos modifican si es necesaria la medicación habitual del paciente, controlan las constantes bioquímicas y pautan la suplementación (vitaminas, minerales y proteínas) necesaria para conseguir un estado óptimo en el paciente.

«Es relevante destacar que no se trata de una cirugía estética» explica la Dra. Esther Nve, cirujana general y del aparato digestivo en la Unidad de Cirugía Gástrica del Hospital. «El sobrepeso implica una disminución de los años de vida, mayor incidencia de cáncer, muerte precoz y diversas comorbilidades (diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares y cerebrales, etc.). Esta cirugía va encaminada al control del peso, pero sobre todo al control de estas enfermedades asociadas. Cuando se indica es porque existe una valoración consensuada de varios especialistas».

Según las recomendaciones científicas basadas en estudios totalmente contrastados, se recomienda una operación de obesidad (cirugía bariátrica) en todos los pacientes con IMC mayor de 4 y pacientes con IMC entre 35 y 39 que sufran síndrome metabólico (diabetes del adulto, hipertensión , hiperlipemia, hiperuricemia) o patologías importantes que la obesidad agrava su evolución o pronóstico de forma relevante (osteoartritis, patología pulmonar o cardíaca, accidentes vasculares cerebrales, apnea del sueño, enfermedades reumáticas). La cartera de servicios del Hospital General de Granollers se amplía con esta intervención, evitando las derivaciones de pacientes a otros centros hospitalarios.

Esta cirugía implica realizar cambios en el sistema digestivo para ayudar a perder peso. Se aplica cuando la dieta y el ejercicio no han funcionado o cuando existen problemas relevantes de salud a causa del peso. Algunas intervenciones limitan la cantidad que se puede comer; otros, funcionan reduciendo la capacidad del cuerpo para absorber los nutrientes.