Los Mossos d’Esquadra investigan el robo de un coche en el polígono industrial de Palou, en Granollers, a inicios del mes de abril, según ha informado el diario digital Elnacional.cat. Esta noticia no habría saltado a los medios de no ser por las curiosa forma como se realizó el robo. Al parecer el propietario del coche – un Mini Cooper de color verde – tenía el vehículo en venta en internet y quedó con un presunto comprador en el polígono de Granollers. La cita con el presunto comprador era para poder ver el estado del utilitario.

En el encuentro, el presunto comprador del coche, un hombre de unos 35 años que se hacía llamar Marco, subió al asiento del piloto y le pidió que pusiera en marcha el motor para poder comprobar su funcionamiento. Ya con el motor en marcha, y mientras el propietario le estaba explicando detalles de la situación del coche, el supuesto comprador le dio un puñetazo y se largó con el vehículo.