El ex-inspector jefe de la Policía Nacional de Mataró y Granollers, Félix Riesco, ha pactado con Fiscalía una pena de dos años de prisión, según informan varios medios. A pesar de la pena, Riesco evitará entrar en prisión porque no tiene antecedentes judiciales.

En un primer momento, la Fiscalía pedía nueve años y medio de prisión para el ex jefe de la Policía Nacional por delitos continuados de sobornos, revelación y violación de secretos y para favorecer el tráfico de drogas. Concretamente, en el texto de acusación del Ministerio Fiscal se le acusaba de haber aprovechado su cargo como inspector jefe del cuerpo policial para facilitar información al patriarca de un clan mafioso del barrio de la Mina de Sant Adrià del Besós entre en noviembre de 2015 y junio de 2017. Esta información era relativa a operativos contra el tráfico de drogas que preparaban por los Mossos.

Por estos hechos, el ex jefe de la Policía Nacional fue detenido en junio de 2017 y quedó en libertad con cargos. En octubre de 2017, Riesco volvió a ingresar en prisión por riesgo de fuga. En agosto de 2018 volvió a salir de la cárcel a la espera de la celebración del juicio. Un juicio que finalmente no tendrá lugar, después de que Riesco haya reconocido los hechos de los que se le acusaba y haya llegado al acuerdo con la Fiscalía.

Además de la pena de dos años de prisión, la Fiscalía también contempla cuatro años de inhabilitación para Riesco, quien se jubiló durante la instrucción del caso. También se prevé una multa de 6 euros diarios durante ocho meses y su asistencia a un curso formativo sobre los perjuicios de las drogas.

La Fiscalía también ha llegado a un acuerdo con Ángel Amaya, patriarca del clan al que Riesco pasaba información. En su caso, la pena es de un año y ocho meses de prisión, una multa de 6 euros diarios durante ocho meses y asistir al mismo curso formativo que Riesco.