
La policía local de Canovelles detuvo el pasado lunes a un vendedor de cupones de la ONCE por haber robado en la caseta de uno de sus compañeros. El detenido, vecino de Santa Eulàlia de Ronçana, aprovechaba la llave que tenía de cuando le tocaba trabajar en el kiosko de venta situado entre los cruces de las calles Indústria y Sant Jordi, para abrirlo y llevarse dinero y también participaciones de juegos de la ONCE.
El vendedor fue pillado cuando entraba en el kiosko sin llevar su identificación como vendedor y intentó huir corriendo al pedir que se identificara. La Policía local de Canovelles lo detuvo y al registrarlo pudo comprobar que en su poder tenía las llaves del kiosko de la calle Indústria y de otros dos puntos de venta en la misma población de Canovelles.
Los agentes investigan si los robos podrían haberse producido en otros puntos de venta de la ONCE en la localidad.