Los Mossos han recibido esta mañana un aviso que les alertaba que en el interior del remolque de un camión procedente de Turquía que había llegado el polígono industrial que la empresa Mango tiene en Lliçà d’Amunt había diez personas de origen extranjero. Inmediatamente, los agentes se han dirigido hasta el lugar de los hechos y han activado los Servicios de Emergencias Médicas que han trasladado a estas personas al Hospital de Granollers donde han sido atendidas ya que su estado de salud era de debilidad aunque que ninguna de ellas se encontraba en situación grave. Se trata de 4 menores y seis adultos ( una mujer y cinco hombres) que habrían viajado escondidos en el remolque de este camión.
Algunas versiones señalan que estas personas, al parecer kurdos de origen Iraquí, pero sin ninguna documentación, que habrían embarcado en Turquía hace cuatro días, podrían haber sido engañados por una mafia que les habría cobrado por trasladarlas clandestinamente hasta el Reino Unido. Un barco les habría permitido atravesar el Mediterràneo hasta el puerto francés de Séte, desde donde habrían sido trasladados en camión hasta el Vallès Oreintal.
Ante la sospecha de que las personas localizadas en el interior del camión podrían estar huyendo de una zona de conflicto y podría tratarse de personas que tendrían la intención de pedir asilo político, desde primera hora de la mañana los Mossos han puesto en contacto con la Secretaría de Igualdad, Migraciones y Ciudadanía para informar de los hechos y hacer seguimiento del caso. Asimismo, se ha activado a la Cruz Roja que se ha hecho cargo de darles asistencia y comida.
Desde un primer momento, informan los Mossos «se ha priorizado la atención médica y asistencial de estas personas que han llegado en un estado crítico y al mismo tiempo se ha abierto una investigación para determinar las circunstancias en que habrían llegado a territorio español».
Hacia las dos de la tarde, acompañados de la Cruz Roja y los Mossos han llegado a la comisaría de Granollers procedentes del hospital y allí les han proporcionado comida y bebida.
A partir de las 4 de la tarde, los investigadores han comenzado a tomarles declaración en calidad de víctimas. Se prevé que una vez acaben estas declaraciones, efectivos de la Cruz Roja los trasladen al Servicio de atención a inmigrantes, emigrados y refugiados de Barcelona donde se les proporcionará un alojamiento a la espera de que se clarifique su situación.
En cuanto a los cuatro menores de edad, estos han sido entregados a la Fiscalía de Menores y la Dirección General de Atención a la Infancia será el órgano que se haga cargo.
Paralelamente, los Mossos están tomando declaración al conductor del camión que los traslado hasta Lliçà d’Amunt desde el puerto francés de Séte, que en todo momento está colaborando con la policía, de la misma manera que lo hace la empresa para la que trabajaba.