Muchos somos los catalanes nacidos o de adopción que diariamente nos formulamos la misma pregunta. ¿Qué esta pasando en nuestra Cataluña? Si, nuestra! Me refiero a la de todos, a la Cataluña plural, solidaria, emprendedora, negociante, referente para el resto de comunidades, aquella que era la envidia sana y que se hizo grande con el esfuerzo de todos los españoles que vieron una oportunidad de poder prosperar y tener un futuro mejor para ellos y sus hijos, la que todos hemos conocido como la “CATALUNYA DE SENY”.
Es evidente que algo desde un tiempo a esta parte se ha ido cociendo y transformando en la sociedad Catalana, aquella que votaba su Catalanidad como Españolidad aquella en que su gerifalte Jordi Pujol arrasaba y que con posterioridad vemos que ha sido un manto tupido de intereses.
Somos muchos los que no entendemos como esta sociedad puede pasar de una sociedad de bienestar de derechas a un totalitarismo radical de Izquierdas cuyo único interés es trasgredir y violentar a la sociedad.
¿Dónde están esos catalanes de seny? Me niego a creer que todos aquellos que votaban al mesías, han pasado en un nanosegundo a ser republicanos, independentistas y están encantados con compartir vida con las esponjas en comuna y ser los nuevos»ecoperroflautistas” de la ansiada república transgresora.
La “Cataluña del seny” no es la Cataluña que se manifiesta en Amposta en contra del Plan hidrológico de la cuenca del Ebro, la que agrede a sus representantes políticos a las puertas del Parlament, la que retira los retratos de su majestad de todas las salas de plenos de los ayuntamientos, la que retira la bandera española de la mayoría de Ayuntamientos locales alegando conceptos estúpidos, la que cambia calles obviando la historia e incluso intentando cambiarla a base de mentiras, la que impone banderas, la que violenta a los padres con una educación escolar tendenciosa, partidista y de doctrina que incluso se atreve a señalar a esas familias que defienden sus derechos, la que nos martillea con personajes oscuros como Companys, Xirinacs, incluidos terroristas, la que su máxima representación el Presidente del Parlamento promulga que se tiene que engañar al estado, la que incumple las sentencias judiciales, la que promueve falsos plebiscitos detrás de elecciones autonómicas, que llegan a perder y continúan engañando con falsos paraísos a base de mentiras tendenciosas.
¿Con qué exigencia nos pedirán las instituciones catalanas que cumplamos sus mandatos cuando ellos incumplen constantemente?
No podemos tener una Cataluña que en esta ultima legislatura olvide a sus ciudadanos, ejecute recortes encubiertos, continue violentado a la sociedad con enfrentamientos inútiles, que solo anteponga el mono-tema de la supuesta llegada a Itaca. No debemos olvidar que la deuda de Cataluña en 2010 era de 35.616 millones y en el 2015 se ha duplicado llegando a 72.274 millones, que desde el inicio del proceso secesionista se han dejado escapar mas de 3.000 empresas….¡Esta no es la Cataluña de nuestros abuelos y padres, la trabajadora, visionaria y emprendedora!
Esta tierra no puede ser la que olvida su emblema histórico, la “Senyera”, por una bandera inventada, “la Estelada”.
Por todo eso recuperem el seny, recuperem la senyera!!
Jaume Gelada
