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La compañía eléctrica Endesa ha comenzado a utilizar drones equipados con cámaras de alta resolución para registrar y revisar el estado de las líneas eléctricas en el Vallès Occidental y el Oriental. Estos aparatos aéreos no tripulados permiten inspeccionar las líneas sobre todo en puntos de difícil acceso, por lo que son una medida complementaria a las termografías que desde hace años se realizan desde los helicópteros. Su uso, además, aseguran que evitará muchos cortes de servicio. Estos son inevitables por motivos de seguridad cuando los operarios deben inspeccionar las líneas sobre el terreno.

Los multicopteros -de cuatro, seis u ocho aspas- que se utilizan se pueden comandar a unos 3 kilómetros o más de distancia y son capaces de despegar y aterrizar solos mediante la propulsión eléctrica, así como de mantener la posición y la altura automáticamente gracias a un GPS y un control barométrico de altura. Como medida de seguridad incorporan un sistema que, en caso de pérdida de señal, retornan al punto de partida.

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Estos vehículos teledirigidos, que pesan entre dos y cuatro kilos y que una vez desplegados tienen unos 75 centímetros de longitud, están equipados con cámaras de alta resolución estabilizadas giroscòpicament que permiten captar imágenes de las líneas, especialmente en zonas con accesos complicados, y sin tener de interrumpir el servicio a los clientes. Se caracterizan por ser muy estables en pleno vuelo, lo que permite hacer grabaciones de alta calidad.

“De esta manera- se explica desde la empresa- se agilizan las inspecciones en detalle de los elementos del cableado aéreo, ya que no se debe programar un corte en el suministro para que los técnicos puedan los soportes y examinen la infraestructura, lo que mejora la calidad y la continuidad del servicio, a la vez que aporta más seguridad”

Por otra parte, la Compañía también ha comenzado a utilizar estas aeronaves no tripuladas para verificar la anchura de los pasillos y senderos de seguridad que se encuentran debajo y a los lados de la línea y que actúan como cortafuegos. Además, también están pensados ​​para poder hacer reconocimientos aéreos del terreno en caso de situaciones de emergencia y se está estudiando si es posible incorporarlos también una cámara termográfica como la que llevan los helicópteros para hacer revisiones de líneas.

La Compañía, pionera en la utilización de drones para revisar líneas eléctricas, comenzó a utilizar los aparatos por primera vez hace ahora dos años en el Alt Camp y también se han introducido en la Cataluña Central, Girona, Garraf y en las comarcas de Lleida.

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