Francisco Barbachano
Cuando el médico te dice
eso es cosa de los nervios, 
ya puedes ir preparándote
porque és chungo el remedio;
que los nervios desmedidos
hablan de cautiverio.

Eso suele funcionar
para un caso como el suyo
dice el médico al recetarlo
y no agrede su consumo.
Creo que le irá bien:
tómelo tal cual prescribo.

Pero los nervios, nerviosos,
no se enteran del remedio
y como es natural
hay que volver a ir al médico
el cual prescribe de nuevo, 
dando ánimo al enfermo.

Y así vuelta a empezar
por tratarse de los nervios;
que es, por sabido se calla,
lo más chungo de los cuerpos.
Y al llegar a centenario
dicen: murió de los nervios!

 Francisco Barbachano