Julián Muñoz
de Marbella ex alcalde
fue un personaje nefasto
y del todo denigrante.
duele decirlo en su muerte;
pero negarlo no vale.
Vivió como un rajá
sin respeto, ni vergüenza.
Trincaba a manos llenas
con singular destreza.
Dejó en la ruina a Marbella,
ese habilidoso menda.
Con experta colaboración
bolsas llenas de pasta
llegaban, una tras otra,
llenitas hasta su casa
y nunca más se ha sabido,
donde está la pasta gansa!
Fue un figura el gran Julián
y su muerte fue muy dura.
Ello es obvio y evidente
que a nadie hay que desear.
Criticarle no ha de impedir,
desearle que Descanse en Paz.
Francisco Barbachano