La Asociación de Municipios del Eje de la Riera de Caldes (AMERC) celebró este miércoles, 25 de septiembre, su décimo aniversario en el marco de la asamblea anual de la entidad. Durante el encuentro, el Ayuntamiento de La Llagosta asumió la presidencia de la asociación, relevando a Palau-solità i Plegamans en este cargo. Los alcaldes y alcaldesas de los municipios que forman parte de AMERC firmaron una declaración con motivo del décimo aniversario de esta asociación, que incluye a Caldes de Montbui, La Llagosta, Palau-solità i Plegamans, Polinyà, Santa Perpètua de Mogoda y Sentmenat. La declaración destaca que estos municipios «representan un territorio con personalidad propia, compuesto por más de 90.000 habitantes, donde compartimos problemáticas, retos y oportunidades».
La lectura de la declaración estuvo a cargo de los alcaldes saliente, Oriol Lozano, de Palau-solità i Plegamans, y entrante, Òscar Sierra, de La Llagosta. En el décimo aniversario, los municipios se comprometieron «a seguir trabajando conjuntamente para fortalecer la concertación territorial con los agentes sociales y económicos, buscando nuevas alianzas que fortalezcan la asociación, con el objetivo de mejorar la eficiencia y la eficacia de las políticas de desarrollo local y empleo desde un modelo de gobernanza participativa, optimizando así el uso de los recursos públicos».
Como primera acción bajo el nuevo mandato, los municipios acordaron la redacción de un Plan Estratégico que recoja los desafíos y oportunidades de este territorio situado en el eje de la Riera de Caldes, y detalle las nuevas acciones a implementar.
El alcalde de La Llagosta y nuevo presidente de AMERC, Òscar Sierra, destacó que en este nuevo mandato la asociación enfrentará nuevos retos para seguir consolidando los lazos políticos y sociales, con el objetivo de progresar en los municipios, impulsar la transformación económica y mejorar la calidad de vida de las personas. Sierra subrayó como principales desafíos «combatir el cambio climático y crear una economía sostenible a través de políticas públicas para lograr un futuro sostenible y de prosperidad económica». También mencionó los retos en materia de movilidad pública y sostenible, recordando la construcción de la estación intermodal que el Estado está llevando a cabo en La Llagosta.
Por su parte, el alcalde saliente, Oriol Lozano, valoró positivamente la acción conjunta de los seis municipios en la asociación y animó a la nueva presidencia a continuar con los proyectos en marcha y aprovechar las oportunidades que se presenten. En la misma línea, el alcalde de Polinyà, Javier Silva, calificó este mandato como «definitorio no solo por los retos del territorio, sino por los de la propia asociación».
La alcaldesa de Sentmenat, Montserrat Rueda, subrayó la diversidad de tamaños entre los municipios miembros de AMERC y destacó la importancia de definir en este décimo aniversario «hacia dónde queremos ir y qué queremos lograr».
El alcalde de Caldes de Montbui, Isidre Pineda, calificó a AMERC como un «proyecto imprescindible» y un «lobby estratégico territorial». Pineda recordó los objetivos fundacionales de la asociación, enfocados en el desarrollo empresarial, la industria y la creación de empleo en el territorio. “Debemos saber interpretar los nuevos desafíos y trabajar para enfrentarlos», añadió.
La alcaldesa de Santa Perpètua de Mogoda, Isabel García, señaló que «hace diez años supimos interpretar la realidad, y ahora tenemos la obligación de leer el presente y elaborar un plan para anticiparnos y alcanzar el futuro con objetivos conjuntos». En este sentido, García defendió la necesidad de un Plan Estratégico para AMERC que ponga en valor el gran potencial del territorio y logre los mejores resultados mediante las políticas más adecuadas.
Los seis alcaldes y alcaldesas valoraron positivamente el trabajo conjunto que realiza AMERC en el ámbito político y técnico, recordando los inicios del organismo hace diez años. “Nacimos con valentía y con el objetivo de ofrecer respuestas conjuntas al territorio, frente a las dificultades, mediante un proyecto pionero que nos hiciera más fuertes y competitivos territorialmente”, explicó la alcaldesa de Santa Perpètua, una de las fundadoras de la asociación. Asimismo, los representantes municipales expresaron su deseo de que la entidad continúe su trayectoria, destacando los avances logrados en áreas clave como el desarrollo local, la transición energética y la movilidad en el territorio.
En estos diez años, AMERC ha contribuido al desarrollo económico del territorio mediante políticas enfocadas en la mejora de las empresas, la formación y el empleo. También ha impulsado la transformación energética, promoviendo la creación de comunidades energéticas y otros programas para combatir la emergencia climática. En cuanto a movilidad, la asociación ha implementado vehículos eléctricos compartidos y ha desarrollado una red de itinerarios seguros en los polígonos industriales, entre otras iniciativas. Además, la entidad trabaja activamente en el impulso del comercio local, con proyectos como la plataforma Compraprop.
AMERC nació en 2014 y está compuesta por los municipios de Caldes de Montbui, La Llagosta, Palau-solità i Plegamans, Polinyà, Santa Perpètua de Mogoda y Sentmenat. La asociación tiene como objetivo la concertación territorial para el desarrollo de políticas activas de empleo, el desarrollo empresarial y la creación de empleo en estos seis municipios. El territorio abarca 109 km², con una población de más de 90.000 habitantes, y un tejido empresarial que incluye 33 polígonos industriales con unas 3.100 empresas y más de 55.000 puestos de trabajo.
La presidencia de la entidad es rotatoria y anual, en función del número de habitantes de cada municipio. Santa Perpètua ha ostentado la presidencia en 2014 y 2021; Caldes, en 2015 y 2022; Palau, en 2016 y 2023; La Llagosta, en 2018 y comenzará su segundo mandato en 2024; Sentmenat, en 2019; y Polinyà, en 2020.