
Una aspirante a Mossa d’Esquadra está en prisión preventiva acusada de haber matado a su compañero de piso en Ripollet, en abril de este año. Según informa El País, los Mossos d’Esquadra la detuvieron el pasado 13 de julio, tres meses después del crimen. La sospechosa, de 44 años, también está investigada por presuntos malos tratos a otros exparejas.
La víctima, de 46 años, murió en su piso el pasado 7 de abril. En la misma vivienda, los agentes encontraron a la acusada, que aseguró que ella estaba en la ducha y se le encontró muerto cuando salió. El cuerpo presentaba heridas de arma blanca, que podrían apuntar al suicidio, y varios moratones. Los Mossos abrieron una investigación.
La arrestada aún no ha declarado ante el juez. La policía necesitó tres meses para recopilar indicios suficientes para detenerla el 13 de julio. El juzgado de instrucción decretó prisión preventiva para la acusada.
La causa sigue abierta y los Mossos siguen investigándola, así como la presunta implicación de la mujer en otras situaciones violentas, tanto con hombres como con mujeres.