
La dirección del Instituto de Montmeló ha generado controversia al negar la autorización de una huelga estudiantil programada para este jueves en solidaridad con Palestina, argumentando “implicaciones políticas y religiosas”. Esta decisión ha provocado una enérgica respuesta por parte de Canviem Montmeló, que ha emitido un comunicado exigiendo explicaciones y el reconocimiento del derecho a la huelga y la manifestación.
Según el comunicado de Canviem Montmeló, la negativa del Instituto a autorizar la huelga de estudiantes de hoy infringe los derechos constitucionales y legales de los estudiantes. El derecho a la huelga está reconocido en la Constitución española y en la Ley Orgánica 8/1985, que regula el Derecho a la Educación.
La declaración de Canviem Montmeló hace referencia al artículo 8, párrafo 2 de esta ley, que establece que las decisiones colectivas de los estudiantes, a partir del tercer año de educación secundaria obligatoria, en relación con la asistencia a clases, no pueden considerarse como faltas de conducta ni ser objeto de sanciones cuando sean resultado del ejercicio del derecho de reunión y se comuniquen previamente a la dirección del centro.
En su comunicado, Canviem Montmeló argumenta que la dirección del Instituto ha excedido sus competencias al denegar la autorización de la huelga estudiantil debido a motivos religiosos y políticos. La huelga fue convocada por los estudiantes para denunciar el conflicto y el sufrimiento de la población en la Franja de Gaza.
En respuesta a esta situación, Canviem Montmeló ha instado al Instituto a rectificar su decisión y autorizar futuras convocatorias de huelga y manifestación presentadas por los estudiantes. Además, han recomendado a la dirección del Instituto la lectura o relectura de la obra de Paulo Freire, el pedagogo brasileño, “Pedagogía del Oprimido” (1968), en la que se destaca que lavarse las manos en un conflicto entre el poderoso y el desposeído equivale a tomar partido por el poderoso y no a ser neutral.