Por todo el oro del mundo
no quisiera, Oppenheimer,
haber estado un momento
en el túnel de tu mente;
que los padres dan la vida,
en lugar de dar la muerte.
Padre fuiste de la bomba
que cercenó el continente,
poniéndola en las manos
de suicidas inconscientes;
que a la orden de aquel Truman,
se hizo noche para siempre.
Julius Robert Oppenheimer
científico, sin rival:
¿Cómo pudiste parir
una máquina mortal?
Hiroshima y Nagasaki,
nunca lo podrá olvidar.
Por todo el oro del mundo
no quisiera, Oppenheimer,
haber estado un momento
en el túnel de tu mente;
que los padres dan la vida,
en lugar de dar la muerte.
Francisco Barbachano