La multinacional farmacéutica suiza Roche ha invertido 51 millones de euros en la renovación del Campus Barcelona, en Sant Cugat del Vallès, un espacio de más de 30.000 metros cuadrados que reúne a más de 1.300 trabajadores de una treintena de nacionalidades. La remodelación ha incluido la construcción de un nuevo edificio, el soterramiento y ampliación del aparcamiento y la adaptación del antiguo edificio al nuevo modelo de trabajo colaborativo. La inversión se ha anunciado coincidiendo con el 90 aniversario de la llegada de la compañía a España. Josep Maria Vallmajó, director general de Roche Diabetes Care España, ha destacado «el espíritu de apertura y multiculturalidad» de Barcelona, «centro de atracción de talento de prestigio internacional».
Según una nota de prensa difundida por Roche, el nuevo campus se ha diseñado según tres pilares básicos: personas, espacios y tecnología. Así, se utilizan los espacios como elemento potenciador de las nuevas formas de trabajar, facilitando la interacción a través de sistemas tecnológicos de última generación e implementando nuevas políticas como la de no disponer de espacios individuales en ningún nivel organizativo.
Asimismo indica que el campus fue renovado para convertirse en la primera de las instalaciones del grupo «completamente libre de emisiones de CO2». La estructura del nuevo edificio se ha realizado mediante una solución que permite integrar instalaciones en el interior, una técnica a través de la cual la empresa afirma que se ha reducido el material en un 40% en comparación con los métodos tradicionales de hormigón.
Roche añade que más de la mitad de los equipos del Campus de Sant Cugat desempeñan funciones globales y trabajan para todo el mundo. En concreto, el equipo de Barcelona forma parte de una red de equipos de investigación, diagnóstico y desarrollo de soluciones diagnósticas, innovaciones en ecosistemas digitales y desarrollos en genómica en 17 países, que abarcan cuatro continentes.