Catalunya tiene sobre la mesa acoger una planta de fabricación de prototipos de microchips junto al Sincontró Alba, en Cerdanyola del Vallès, según ha anunciado este martes por la noche el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.
En su discurso en el Círculo de Economía, Aragonès ha anunciado que el proyecto «requiere de una inversión de 300 millones de euros, que están ahí», ya que se podría vehicular a través de los fondos europeos. Aragonès ha dicho que Cataluña «tiene la ambición de jugar un papel protagonista en la imprescindible reindustrialización europea», y esta planta permitiría prototipar en el país a los semiconductores.
Según han explicado fuentes del Govern, la planta sería «crítica» para reforzar el ecosistema de chips, pero depende de una decisión del gobierno español, que es lo que gestiona los fondos Next Generation.
En este sentido, apuntaron que el proyecto está listo, con los terrenos en Cerdanyola localizado, pero que es necesario el paso en este sentido del ejecutivo español.