El Departamento de Territorio ha iniciado, con las tareas previas de gestión de servicios afectados, las obras de mejora de la C-59 entre Moià y Sant Feliu de Codines para favorecer su seguridad. Asimismo, se ha constituido la comisión de seguimiento de la obra formada por el Departamento, Ayuntamientos del ámbito en el que se actúa y representantes vecinales. La obra, que cuenta con una inversión de 6,4 millones de euros, consistirá principalmente en el acondicionamiento de un tramo de 16,5 kilómetros para favorecer la comodidad y la seguridad en la conducción. Los trabajos tienen un plazo de ejecución de 11 meses.

Las obras que ahora comienzan abarcan el tramo de la C-59 entre la intersección con la carretera N-141c, en Moià, y la zona urbana de Sant Feliu de Codines y comprenden también los términos municipales de Castellterçol y Sant Quirze Safaja. Las principales actuaciones que se van a ejecutar son la renovación del firme, la mejora de la canalización del tráfico en cruces, la implantación de un separador de flujos para reducir el riesgo de choques frontales y la aplicación de medidas para evitar accidentes con animales .

Las obras incluyen aspectos como que para reforzar la separación de sentidos, se implantará un separador de flujos en un tramo de 2,2 kilómetros, al paso de la carretera por los términos de Sant Feliu de Codines y Sant Quirze Safaja. Así, se formará una franja central roja para hacer más visible la separación de sentidos en la conducción y, de esta forma, contribuir a reducir el riesgo de sufrir choques frontales.

Para evitar accidentes con animales, se acondicionarán obras de drenaje como pasos de fauna; se colocarán vallas cinegéticas en los márgenes de la carretera y se ejecutarán pasos canadienses –pasos formados por barras metálicas en los accesos para impedir el paso de animales. Además, se construirá un nuevo paso de fauna en el tramo entre Castellterçol y Moià, que es el tramo donde se concentra más accidentalidad por atropellos de animales.