A partir del viernes 9 de diciembre, Ferrocarriles de la Generalidad de Cataluña (FGC) mejorará el servicio en la línea Barcelona-Vallès. Se trata de una nueva configuración de los horarios y líneas que la compañía ha diseñado para aumentar las frecuencias y poder dar respuesta al aumento de la demanda experimentado en los últimos años, como consecuencia, en gran parte, de las prolongaciones de Sabadell y Terrassa.
La configuración del nuevo servicio y la mejora y aumento de las frecuencias ha sido posible gracias a la compra de 15 nuevas unidades de tren, que ha permitido plantear un nuevo servicio para aprovechar al máximo la infraestructura de la línea y garantizar, al mismo tiempo, estabilidad y la robustez del servicio. Además, Ferrocarrils ha llevado a cabo una serie de actuaciones en la línea para simplificar la explotación, maximizar la regularidad en la línea y optimizar los recursos asociados.
Con esta mejora del servicio, aseguran desde la Generalitat, se incrementará en un 37% el número de plazas que ofrece la línea y se pasará de una capacidad de 80 millones de viajes al año a 110 millones. Con este incremento y la infraestructura actual, se alcanza la máxima capacidad de esta línea que une Sabadell, Terrassa, Sant Cugat, Rubí, UAB, Sant Quirze del Vallès y Bellaterra con el centro de Barcelona, una línea que el año 2019 alcanzó el récord de 66,3 millones de desplazamientos.
A partir del 9 de diciembre, la línea Barcelona-Vallès incluirá el servicio de las líneas S1 Terrassa, S2 Sabadell, L6 Sarrià, L7 av. Tibidabo y L12 Reina Elisenda. Las líneas S6 Universidad Autónoma y S7 Rubí se prolongan hasta Sabadell y Terrassa, desaparecen como líneas y se convierten en trenes de las líneas S1 y S2. Por lo que respecta a la línea S5 Sant Cugat, también desaparece y su servicio lo absorben también las circulaciones de las líneas S1 y S2. Así, a partir de ahora, los trenes S1 y S2 pararán en todas las estaciones y cubrirán el servicio y paradas de las actuales líneas S5, S6 y S7.
Esta simplificación de líneas y servicios ha estado motivada por la necesidad de aumentar la capacidad de la línea y aprovechar al máximo la infraestructura y todos los recursos asociados, eliminando los trenes semidirectos que no hacían todo el recorrido de la línea o que no paraban en todas las estaciones, que representaban una pérdida de capacidad de la infraestructura de la línea.
La nueva oferta de servicio en la línea Barcelona-Vallès, con la nueva configuración de líneas, implicará un aumento de trenes por día entre Barcelona y los ramales de Sabadell y Terrassa. Así, en hora punta pasará un tren cada 5 minutos por Sabadell y Terrassa y cada 2,5 minutos por Sant Cugat. Estas frecuencias suponen un incremento de la oferta de trenes respecto a la situación actual: se pasa de 22 a 24 trenes por hora y sentido en Sant Cugat en la hora punta y de 6 a 12 trenes por hora y sentido en Sabadell y Terrassa .
En cuanto al resto del día, se establece un servicio consistente en una frecuencia de un tren cada 10 minutos desde/a Terrassa y Sabadell, lo que representa un tren cada 5 minutos desde/a Sant Cugat.
Este incremento de la oferta hará que en hora punta circulen el doble de trenes para comunicar a Barcelona con Sabadell y Terrassa, un 37% más con la Universidad Autónoma, un 22% más con Sant Cugat y un 20% más con Rubí.