Ya sabemos que el derecho, no es una ciencia empírica, pues tiene sus humanas limitaciones; pero de eso, a pasar a ser un puro mercadeo, como si fuese mera bolsa bursátil, mezclando realidades y sueños de socialistos o separalistos, hay una gran diferencia, por mucho que diga aquel verso de Campoamor: “Que nada es verdad, ni mentira, todo depende del cristal con que se mira”.
Observemos este relativismo en la prensa, del periódico El País por ejemplo, donde: 1) vemos que el 25-10-2017,- días después del ilegal referéndum-, mantenía en un artículo que “Europa castiga con dureza el delito de rebelión y sedición; 2) 25-10-2022, exactamente cinco años más tarde, cambia de tercio y ahora nos dice lo contrario, es decir que ambos delitos requieren violencia e intimidación, y que las penas son más bajas que en España.
Otro ejemplo reciente, del periódico “El diario.es” de fecha 25-10-2022, también de tendencias de izquierda que nos dice una incoherencia ya inicial: “que en caso de modificarse las penas, esto no afectará a los fugados del proces”, cuando es notorio, que toda modificación penal goza del principio de retroactividad para el reo. Posteriormente, nos va detallando las diferentes penas en una comparativa con Europa, indicando que en el caso de Alemania, las penas no pasarían de los 3 años “o multa”, y el agravado, iría de 6 meses a 5 años (en términos similares expresa que se penaría en los ejemplos de la legislación Suiza, Bélgica o Portugal).
A sensu contrario, “ABC”, nos indica que en Alemania, la rebelión sería cadena perpetua, la traición, consistente en “toda alteración del orden constitucional”, (que apreciarían los tribunales) ejercida con “violencia o amenazas”; y la alta traición, sería incluso sin consumar. Según ese mismo medio, Francia penaría hasta con 15 años según su art. 412.5: “toda violencia colectiva que ponga en peligro la república o atente contra la integridad territorial”.

¿Quién dice la verdad, como diría Pilatos? Efectivamente, Alemania, es el país que más sanciona dicha sedición en su código penal según el artículo 472, con penas que van de 15 a 25 años de cárcel, e incluso 30 si se usa armas o “violencia grave”. No podemos interpretar, como algunos interesados pretenden, que la sedición sería la simple y mera alteración de la “paz pública”, la cual solo estaría penada con tres años, y ello por afectar a la constitución y a lo esencial de la innegociable territorialidad nacional, tal como el TC. Tuvo la ocasión de expresar en la sentencia 16-12-2016, sobre la posibilidad de un referéndum soberanista bávaro: “Los länder, no son señores de la constitución, ni están facultados ni tienen potestades para ello”.
Es obvio que los separatistas aprietan al Gobierno, y estos, solo están esperando “pasen las elecciones municipales” para tener que cumplir esa promesa realizada en su día a quienes no aceptan ni la constitución ni las leyes, y a la vez, riéndose del pueblo español en su conjunto, en especial de los “constitucionalistas residentes en Cataluña, (a los que el Gobierno igualmente ignora y ni se digna en sentarlos en tal “extraña mesa negociadora de lo innegociable” para toda la sociedad civil), y pretenden a la par, hacerse pasar por perseguidos en un claro “síndrome de doble personalidad”; pues lo que no es de recibo, es que intenten alterar la realidad, modificando a capricho el objeto de la rigurosa regulación de dichos delitos en el marco europeo (al más puro estilo de los hermanos Marx con aquello del “contratante de la otra parte contratante…”) y que E.R.C., pretenda convencernos, que solo piden una regulación al estilo de Francia, “Alemania” o Suiza, pues, o no se han mirado la legislación, o sencillamente quieren hacernos partícipes de su propia ignorancia o burda manipulación.
Esa hoja de ruta de alterar la realidad, ni les dio ni les dará ventaja alguna a nivel internacional, salvo paradójicamente con el Gobierno de España, y con ello, conseguirán hundir al PSOE en las próximas municipales y generales, partido que si bien en principio, tendría una clara razón de pactar con los separatistas, -dada la negativa en su día del Sr. Casado en hacer un pacto de estado, para evitar así, que nos gobernaran los que quieren destruir España-, ahora no tiene excusas con el ofrecimiento de Feijóo a tal fin.
En el plano internacional, la realidad nos dice, que las pírricas victorias del separatismo, se limitan a anécdotas, en especial en poner en evidencia a determinados organismos internacionales a base de “untar y engrasar sus ejes” con el dinero de todos, eso que se denomina en todos los códigos penales “malversación de caudales públicos”, y como antaño, no están libres que próximamente les vuelva a pasar factura (aviso a navegantes que siguen sin brújula). Así, un departamento de derechos humanos de la ONU, que expresó que se habían vulnerado ciertos derechos fundamentales, resulta que el abogado que lo dirige, tuvo en su día una relación directa, e incluso laboral con la Generalitat. En cuanto a Amnistía internacional, queda únicamente la duda si es pura ignorancia de las leyes y del concepto de las soberanías nacionales, ingenuidad o algo más de lo mismo, aunque la realidad, también algún día saldrá a la luz.
En cuanto a las resoluciones de Bélgica, ya hemos comentado en algún artículo previo, la clara “prevaricación” de dichos tribunales, donde existen los mismos tipos penales por los que se pide la extradición obligatoria existente, sistema judicial obligatorio de agilizar la entrega de perseguidos por la justicia, donde está terminantemente prohibido entrar en el fondo de la cuestión tal como hicieron. Nada nuevo en el país protector de etarras y delincuentes y donde el caos político y social es tan manifiesto.
Respecto a la resolución en su día de un tribunal “local” alemán, que tuvo la osadía de comparar la sedición de los separatistas, con una ocupación de un mero aeropuerto de los años 70 por un grupo de personas, ya no merece mención alguna, y no se nos escapa una muy probable llamada oportuna de altas esferas alemanas atendiendo a su vez un deseo del gobierno de España para que “el President” continuase haciendo turismo por Europa, pues la otra alternativa ingrata para la paz social, sería tenerlo en prisión.
Finalmente, la resolución del Consejo de Europa (muchos que no forman parte de la U.E., con varios votos en contra como Turquía, Portugal…), para que nos vamos a engañar, ante el hecho notorio que el Gobierno de España, le interesaba atenuar el tema, igual que recientemente intentó impedir la inspección europea sobres incumplimiento del 25% del español en las aulas.
Lo único claro, es que al separatismo, ningún país le dio esperanzas, salvo algún paria que incluso parece se ofrecía a financiar el multimillonario coste de cortar amarras con España, o algún húmedo sueño de verano en que los rusos aterrizaban con un ejército de mercenarios. En definitiva, la generalidad de los foros internacionales en su conjunto, mostraron su claro rechazo, incluyendo la esencial Comisión de Venecia, incluso la propia Asamblea General de la ONU, (y no una mera sección de derechos humanos, donde evidente sus resoluciones, no tienen la más mínima relevancia jurídica, limitándose a lo sumo a ser mera recomendación).
Y lo que es más importante, que el máximo órgano que debe fiscalizar la sentencia del T.S., es decir el T.E.D.H, ya se ha manifestado en dos ocasiones (demanda de una letrada de Tarragona, que decía ser afectada el día de la votación, y demanda de algún condenado por el propio T.S) optó por manifestar la clara “ilegalidad” del proces, Tribunal que si algo llegasen a sacar los separatistas, serían a lo sumo, meros matices referentes a la tutela judicial plena, nada más, pese a sus claras vanas esperanzas. No obstante, con la pretendida ” reforma a la carta” de la sedición, de ser previa a la sentencia, qué duda cabe que tendría su relevancia para desmantelar e incluso cuestionar la sentencia del TS., al pasar de 15 años de pena, a cinco (por lo que, con la condicional, en “tres años y pocos meses”, estarían en la calle), con lo cual, paradójicamente, se podría mantener, que los separatistas, conseguirían en España, lo que no consiguieron en los foros y tribunales del resto del mundo que se rige por un pétreo “statu quo” de legalidad, incluso sin pagar para variar, y más bien sacando además beneficios múltiples económicos como resultado de ese actuar rebelde, antisocial e inconstitucional.
En definitiva, el soberano, no acepta la manipulación de los medios del poder tendentes proyectos futuros de preparar la “cama” a la siguiente sedición, que se podría interpretar perfectamente como una “antesala a otra inducción o provocación” de autoridad pública del mismo art. 545 y 548 del actual Código Penal; como no aceptó en su día los indultos ( pese al aparente silencio), y que sin duda, pese a las ya más que cuestionadas estadísticas del C.I.S, tendrá su contundente reflejo en las próximas urnas tanto municipales y generales. Entonces es cuando el PSOE, lamentará lo que no tendría que hacer, incluyendo toda la permisiva legislación confiscatoria de la propiedad privada propiciada por Podemos (cuando aproximadamente el 71%, es en régimen de propiedad en España).
Si comparte también la triste frase del “gran estadista” Rufián, conforme los españoles no se preocupan de la modificación del Código Penal, y solo de las hipotecas e inflación, será un craso último error, y el tiempo, como mejor juez imparcial, lo confirmará, incluso pese a Tezanos, o a esas permanentes invocaciones apocalípticas que “viene el lobo” de la ultraderecha,! como si el de la ultraizquierda, no metiese miedo ¡. Conclusión “menos lobos”, que haberlos haylos y muchos, por lo que no iría mal de proveernos de un “pastor electrónico”, como garantista cordón sanitario.
José Manuel Gómez