El día menos pensado
me arranco por soleares
y les canto bien la caña
a todos los mandamases;
que lo que sobra en España,
son chupópteros sin clase.
Currelan a su manera
y van chupando del bote:
ese bote que pagamos
los que de verdad curramos.
Y es que esos mendas son hábiles
para mantener su estatus.
No se engañen, da lo mismo,
ser de derechas o izquierdas;
estar gordo o canijo,
alto bajo, rubio o moreno.
Todos buscan con tesón,
el pastel más suculento.
Por supuesto, el pastel,
es para ellos y ellas.
Que no se me ofenda nadie
por dejarlo sin merienda;
que las féminas también,
de poder están sedientas.
Francisco Barbachano