Tan lleno de despropósitos
está el mundo actual que,
cuesta conciliar el sueño,
y dormirse de verdad.
Si sueñas, es un mal sueño,
imposible de olvidar.
Si alguien cuenta alegrías
es pura casualidad;
pues sólo cuentan desdichas
y alguna calamidad;
depresiones y amarguras
y cien infortunios más.
Los psicólogos en el mundo
son una necesidad,
para que hombres y mujeres
puedan vivir en paz;
pues todo está tan revuelto,
que su ayuda es eficaz.
Eficaz, necesaria,
y triste tenerla que usar;
pues el pan de cada día
es la intranquilidad.
Patética sinfonía,
es la que toca bailar!
Francisco Barbachano