La Policía Nacional ha desarticulado una red de distribución de cocaína que ocultaba la droga en coches manipulados, según ha avanzado ‘El Periódico’. Los presuntos delincuentes vendían el estupefaciente en diferentes ciudades del área metropolitana de Barcelona, como la misma capital catalana, y otros del Vallés como Sabadell o Terrassa. La investigación ha durado un año y medio y ha supuesto la detención de 22 personas en diferentes fases. Según la investigación, la droga se adquiría en el extranjero para ser vendida después en Cataluña. La última fase de la operación tuvo lugar el pasado martes, cuando se hicieron 8 detenciones entre ellas la del presunto jefe de la red.
La investigación comenzó en octubre de 2019 en Sabadell, a partir de la detección de pequeños narcotraficans que permitió llegar a la cabeza de una organización, un individuo marroquí que compraba cocaína y hachís en el extranjero.
La operación ha tenido cuatro fases de detenciones, la última de las cuales la del pasado martes contra la cúpula de la red. Según publica el rotativo barcelonés, se trata de personas de nacionalidades española y marroquí.
En esta última fase la policía ha hecho 14 registros en viviendas de Sabadell, Terrassa y Rubí, locales de Sabadell y Sant Quirze del Vallès y garajes de Sabadell. Se han decomisado 3 kilos de cocaína y diferentes cantidades de menos alcance de otras sustancias estupefacientes. También se han requisado 22.000 euros en metálico y armas de fuego simuladas.
Aparte, la policía ha descubierto tres automóviles modificados para equiparlos con compartimentos escondidos para transportar la droga.
Los detenidos están acusados de tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal y blanqueo de capitales.