De nuevo estamos aquí
mis ripios y el que suscribe
deseando hayan sido
favorables las vacaciones;
plenas de felicidad,
de gozo y satisfacciones.
Siempre ha sido fea costumbre
el hecho de llegar tarde,
es de mala educación
e incluso causa desastres.
Y para muestra un botón,
con lo que voy a contarles.
En cuanto al ‘coronavirus’
los gobiernos y expertos,
no se enteraron a tiempo
y fueron sumando muertos.
Su constante fue mentir
para conservar sus puestos.
Se fueron de vacaciones
regresando bien tostados
y ahora es, cuando advierten,
el terrorífico caos.
De nuevo han llegado tarde;
pero eso sí, descansados.
Francisco Barbachano