El agente de los Mossos de Montmeló detenido por pinchar ruedas de una cincuentena de vehículos en la AP-7, a su paso por el Vallès, ha sido condenado a dos años de prisión, pero no deberá ingresar en ningún centro penitenciario. Durante el mes de diciembre de 2017, el mosso fuera de servicio colocó un artefacto puntiagudo en un punto entre Montornès y Sant Cugat del Vallès, provocando que varios vehículos, sobre todo camiones, sufrieran pinchazos en las ruedas.
Se le atribuyen delitos de daños, contra la seguridad vial y falsedad documental.
El agente deberá comparecer periódicamente ante el juez, se le ha retirado el pasaporte y se le ha intervenido el vehículo, entre otras medidas cautelares
Según informa El Periódico, al agente se le habrían aplicado atenuantes respecto a la pena inicial por haber reconocido los hechos. La fiscalía pedía hasta seis años de prisión ya que consideraba que el imputado había actuado de forma premeditada, haciendo la vía muy insegura y peligrosa generando un alto riesgo para la circulación. Por otra parte, el juez de Granollers también ha acabado suspendiendo la ejecución de la condena, por lo que el Mosso no tendrá que ingresar en un centro penitenciario.
El policía autonómico, vecino de Montmeló, estaba fuera de servicio desde septiembre de ese año. Cuando la investigación concluyó la presunta relación del detenido con el pinchazo masivo de ruedas de los camiones, se pusieron los hechos en conocimiento de División de Asuntos Internos de los Mossos, que le abrió un expediente disciplinario y le suspendió de sus funciones.
