Francisco Barbachano
 “Pido perdón dijo el divo
por el dolor que he causado
a todas las mujeres
las cuales me han acusado”.
Mientras Domingo negaba,
que a nadie había acosado.
 
Costaba mucho creer
que tal hecho fuese cierto
y ver a tan brillante figura
hundida y a ras de suelo;
pero, era llamativo,
su negación o silencio.
 
Escribí con gran tristeza
qué, ‘el que calla otorga’
pues, cuando se és inocente,
se ha de actuar de otra forma
y el  silencio de don Plácido,
no era ninguna broma.
 
Profesionalmente un diez
nadie puede negarselo;
otra cosa es lo impropio
producto del escándalo.
Admirado Plácido Domingo:
¡DIVO!, estoy decepcionado.
 
Francisco Barbachano