Las obras de construcción del tercer carril de la C-17, entre Parets del Vallès y la Ronda Sud de Granollers, se licitarán en los próximos días. Así lo ha confirmado el departamento de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat a La Vanguardia. Los trabajos, que afectan a unos dos quilómetros de vía, tanto en sentido Vic como Barcelona, persiguen mejorar la seguridad y capacidad de esta autovía y podrían ser una realidad en el 2023.

Diariamente circulan por el tramo de la C-17 comprendido entre las autopistas AP-7 y C-33 y la carretera BV-1432 (de Lliçà d’Amunt en Granollers) cerca de 90.000 vehículos, y se estima que en los próximos diez años , con importantes crecimientos urbanísticos previstos, aumenten hasta los 100.000 vehículos diarios. Esta combinación de factores condiciona el nivel de servicio de la infraestructura, que registra congestiones de tráfico, en especial en las horas punta, a la vez que presenta algunos problemas de accesibilidad.

El tramo de la C-17 entre Mollet y Lliçà de Vall está considerado como un punto negro debido al elevado índice de accidentalidad, sobre todo en horario matinal. De hecho es uno de los de mayor concentración de accidentes de Catalunya. En poco más de 8 kilómetros se registra una tasa anual de 0,56 accidentes graves o mortales por kilómetro. Los datos proceden del Estudio Europeo de Valoración de Carreteras de diciembre de 2017 de EuroRAP, el consorcio europeo por la mejora viaria. Este índice ha dibujado una tendencia al alza en los últimos años.