Los Mossos d’Esquadra investigan un tiroteo en una área de servicio de la AP-7, a la altura del municipio de Llinars del Vallès en el que ha muerto una persona tras recibir ocho disparos y ha resultado herido un cabo de la policía local que ha salvado la vida por llevar el chaleco antibalas. El cabo ha recibido un único disparo. Los hechos tuvieron lugar hacia las siete y media de la tarde de este jueves.
Según fuentes policiales, el agente habría quedado con la otra persona, presumiblemente un confidente, cuando se ha acercado un sospechoso vestido de negro haciendo deporte, ha sacado una arma corta y ha disparado en varias ocasiones a la pareja. Después ha escapado por una vía forestal hacia una carretera comarcal. Los Mossos están buscando al sospechoso.
La policía científica estuvo toda la noche del jueves inspeccionando la zona, un descampado detrás de una gasolinera donde los trabajadores de este establecimiento aparcan los automóviles. La policía buscaba indicios del asesinato detrás de unas vallas de madera donde estaba el cuerpo de la víctima. Hacia las diez y media de la noche los agentes avisaron a las autoridades judiciales para que se pudiera ordenar el levantamiento del cadáver.
Fuentes cercanas al caso explicaron que es muy probable que el juez que instruya el crimen decrete secreto de sumario en torno a la causa.
Según ha sabido esta revista, los Mossos ya tienen una descripción detallada del hombre que ha disparado – un individuo de 1,70 de altura- y estaría circulando incluso una imagen con la identidad de este.