Francisco Barbachano
Desvalijar los comercio
y destrozar pavimentos
no es acto independentista
y no hay que guardar silencio;
pues salta bien a la vista,
que és obra de delincuentes.
 
Esquerra Republicana
y Juns per Catalunya
aunque hagan el paripé
es claro que no se tragan;
pero se les ve el plumero
y sus ansias poder.
 
Ni Puigdemont, ni Quin Torra,
son bien vistos por los suyos.
Los soportan, por ahora,
para evitar más barullos;
pero es obvio que están hartos
según confiesan algunos.
 
Catalunya ha llegado
a un extremo tan nefasto
que a los culpables vándalos
hay que desenmascararlos.
Sean ellos, quienes sean,
son vergonzosos sus actos.
 
Francisco Barbachano