La Comisión Nacional de Mercados y la Competencia (CNMC) ha autorizado la operación de compra de Pastas Gallo, con fábrica en Granollers, por el fondo español Proa Capital, cifrada en 227 millones de euros. Según recoge el órgano regulador, la resolución de luz verde tiene fecha de 19 de septiembre pasado, después de que a primeros de julio tuviera lugar el acuerdo de compra tras una subasta del grupo en la que Proa Capital se impuso al grupo formado por Ventura Equity Partners e Idilia Foods y a TowerBrook.

La familia Espona Massana buscaba así el impulso al crecimiento de la compañía y la marca, líder en nuestro país de la pasta seca, salsas, harinas y pan rallado, y que también está presente en el mercado con productos frescos y platos precocinados. En el ejercicio 2018, la firma facturó 200 millones de euros y obtuvo un beneficio bruto de explotación de 22 millones.

Una de las condiciones acordadas era un acuerdo de reinversión a ejecutar una vez se dispusiera del permiso de Competencia. Quienes quieran formar parte, así, del capital tendrán que llegar al 5% de Pastas Gallo. Parece que algunos de los hermanos de la familia fundadora podrían entrar en el accionariado. Proa Capital está considerado un fondo de la parte media del mercado y entre su portfolio de empresas participadas se encuentran Grupo Vips, Neoelectra, Fruselva o Ibermática.