Granollers reforzará a partir de septiembre la policía de barrio. Dentro de unos días de los seis agentes actuales de la policía municipal que patrullan por los barrios de la ciudad se pasará a un total de 12. Esto significará que de cubrir un único turno los siete días de la semana se podrán cubrir los dos turnos de mañana y tarde. Esto mejorará el servicio de los barrios de Sant Miquel, Congost, Ponent, Can Mònic, Can Bassa, Can Gili y Primer de Maig.
La ampliación del número de efectivos destinados a estas funciones será posible gracias a la estabilización de la plantilla de la Policía Local de Granollers en 95 agentes tras el verano ya que se están cubriendo estos días la media docena de plazas vacantes que había.
La policía de barrio en su modalidad actual se puso en marcha en febrero de 2017, cuando la Concejalía de Seguridad impulsó el proyecto con el objetivo de aproximar más la policía al tejido social de la ciudad.
Las patrullas se desplazan a pie por los barrios para poder captar los problemas de los vecinos de cerca. Y no lo hacen siempre solos. El grupo de policías de barrio incorporó el pasado mes de julio el apoyo de un perro pastor belga malinois llamado Bosco entrenado para la detección de sustancias estupefacientes.