Hoy los usuarios de los pipicanes de Terrassa se han encontrado con la desagradable sorpresa de que han sido precintados por el Ayuntamiento de la ciudad. Se trata de un precinto provisional y mientras se investiga la veracidad de unas amenazas que han aparecido en uno de ellos donde se dice que ha sido envenenado con sulfato de estricnina.
Se trata de una sustancia tan venenosa para los animales como para los humanos. Los técnicos municipales han comenzado a tomar muestras en los 9 pipicanes de Terrassa para verificar si los espacios son seguros para personas y animales y de momento no se ha encontrado nada.
Entidades animalistas como Defensa Animal Profesional han presentado denuncia ante la policía de Terrassa para que se investigue quién está detrás de esta amenaza anónima.