El exmaestro de la Escola Joan Abelló de Mollet, Agustín Vadillo ha sido condenado a seis años y medio de prisión por abusar sexualmente de un exalumno y haberle hecho fotos pornográficas mientras dormía en Tossa de Mar (Girona). Este profesor barcelonés había seguido ejerciendo la profesión aunque ya había sido juzgado por otro caso de pederastia en Zaragoza en el 2005. El hombre -que está en prisión preventiva por el caso desde finales del 2017- ha reconocido los hechos que se produjeron en agosto del 2016 y tendrá que indemnizar a la víctima con 15.000 euros.
En el juicio celebrado en la Audiencia de Girona, Vadillo ha explicado que conoció a la víctima porque era alumno suyo en la escuela Joan Abelló de Mollet del Vallès y se aprovechó de esta condición para ganarse la confianza de la madre del menor. De esta manera, el profesor consiguió que el chico pasara al menos una noche en el apartamento de vacaciones de la familia en Tossa de Mar, una vez acabado el curso 2015-2016.
En la madrugada del 1 al 2 de agosto del 2016, hacia las tres de la noche, el acusado le hizo tocamientos en los genitales al exalumno que entonces tenía 11 años. Además, el hombre le hizo 57 fotografías de carácter pornográfico con el móvil. La mayoría de las imágenes eran de las nalgas y los genitales del menor, pero también había algunas donde el profesor aparecía masturbando al alumno.
A finales del 2017, los Mossos d’Esquadra le intervinieron el teléfono al maestro y, después de detenerlo, hicieron una entrada y cacheo en el piso del docente, situado en la avenida Meridiana de Barcelona. En el domicilio, encontraron un portátil donde había 49 imágenes y tres vídeos pornográficos, en algunos de los cuales aparecía la víctima.
El profesor ha reconocido los hechos en el juicio y ha consignado 8.000 euros para afrontar parte de la indemnización. Por eso, fiscalía y defensa han llegado a un acuerdo para condenarlo a 6 años y medio de prisión por| un delito de abuso sexual a menor de 16 años con una atenuante de reparación del daño y un delito contra la intimidad.
Inicialmente se enfrentaba a 14 años de prisión ya que la fiscalía lo acusaba de un delito de elaboración de pornografía infantil. Sin embargo, finalmente lo han condenado por un delito contra la intimidad porque, en el momento de hacer las fotografías, el menor estaba durmiendo. Según recoge una circular de la fiscalía, si el menor no es consciente de la captación de imágenes “no resulta lesionada la indemnidad sexual”.
El juzgado de lo penal 1 de Zaragoza ya condenó al profesor el año 2005. En aquella ocasión, le impuso una pena de 1 año y medio de prisión para hacer tocamientos a otro menor en septiembre del 2004. Según fuentes judiciales, también fue una sentencia por conformidad porque Vadillo reconoció los hechos. Sin embargo, siguió ejerciendo como docente y trabajando con menores.
