El contrato que el Circuit de Montmeló firmó en 2015 para acoger pruebas de Fórmula 1, y que está a punto de expirar, se modificó de manera irregular en beneficio del entonces propietario de la marca, Bernie Ecclestone, y con el aval explícito de parte del Govern de Artur Mas, según ha denunciado el diario El Mundo. Según informa este medio el acuerdo se cambió en el último momento a espaldas del Consejo de Administración del circuito y sin que fuera sometido a su aprobación. Además, el presidente del organismo, Vicenç Aguilera, firmó el documento sin tener cedidos legalmente los poderes para hacerlo.

El diario revela un dato poco conocido: el Circuit ha costado a los contribuyentes catalanes en estos últimos años una cifra superior a los 104 millones de euros, a razón de casi 24 millones anuales. El medio relata que el pacto se firmó el 17 de marzo de 2015 entre el Circuit y la empresa que entonces ostentaba la propiedad de la F1, Formula One World Championship Limited (FOWC). «Un contrato por el que el trazado, cuyo principal accionista es la Generalitat, aceptó pagar 23,4 millones de dólares durante cinco años. Se trata de una cantidad similar a la abonada hasta entonces, pero con un aumento anual vinculado a la inflación de Estados Unidos. En total, más de 104 millones de euros, sin contabilizar los incrementos, que han permitido a Montmeló organizar el Gran Premio de España de F1 hasta la edición de este año, que se celebra entre el 10 y el 12 de mayo», se dice literalmente.

El mundo en su información recoge diversos detalles de la operación.

Actualmente se han iniciado de nuevo las conversaciones para mantener la Fórmula 1 en el Circuit de Montmeló a partir del año 2020.