
Dentro de dos semanas aproximadamente Granollers dispondrá de un itinerario para bicicletas que cruzará toda la ciudad de norte a sur. Esta semana se han iniciado las labores para señalizar este itinerario que conectará el carril bici del tramo norte de la calle Girona con la estación de Granollers Centre. Una conexión ciclable que utiliza soluciones diversas para resolver los diferentes tramos. No todas han gustado a los vecinos y las redes sociales se han llenado de comentarios a favor y en contra de las diferentes soluciones. Puede ser el inicio de una larga polémica ciudadana.

El recorrido combina tramos donde los ciclistas circularán por calzada y convivirán con los vehículos con una velocidad limitada a 30 kilómetros por hora, con un tramo con carril bici segregado habilitado en sentido contrario y tramos por calles de prioridad invertida. Esto, por ejemplo, ha obligado a eliminar en algunos puntos zonas de aparcamiento. En otros lugares, donde las bicicletas convivirán con el tráfico, la solución no parece todo lo segura que debería para los ciclistas.
Se trata de una parte de uno de los 2 itinerarios norte-sur que desde la entidad Granollers Pedala propuso realizar al principio de legislatura, como una estrategia para iniciar una red ciclable en la ciudad, aprovechando calles secundarias y con inversión contenida de sólo pintura y señalización.

La entidad Granollers pedala ha recibido bien la propuesta municipal y a través de las redes sociales ha animado a los usuarios de bicis de a ciudad a utilizar el nuevo itinerario. “Es la mejor forma de convencer al ayuntamiento de Granollers que hay que avanzar en esta línea”, aseguran. Lamentan, sin embargo, que el circuito se haya quedado corto y que el carril bici del tramo norte de la calle Girona, no conecte hasta Les Franqueses, y se quede, por el sur, en la calle Colón. Piensan que habría que continuarlo hasta conectar con los barrios de Tres Torres y Can Bassa.