El lugar donde se produjo el asesinato en enero

La defensa del vecino de La Llagosta que apareció muerto después de que lo quemara vivo su yerno, pedirá que el caso lo juzgue un jurado popular. Así lo ha explicado a la ACN el abogado que representa a la familia de la víctima, Álex Zaragüeta. Los hechos tuvieron lugar la noche del 12 de enero de 2018, cuando presuntamente, el yerno de la víctima prendió fuego a la caseta donde vivía el hombre, ubicada en una zona rural de la población vallesana. El supuesto autor del crimen era la ex pareja de la hija del fallecido, una joven de 24 años que habría decidido cortar con su novio tras sufrir reiterados malos tratos. De hecho, el acusado se encuentra en prisión provisional por haber vulnerado las órdenes de alejamiento dictadas por el juez en relación con un caso paralelo de violencia machista.

El asesinato tuvo componentes de sadismo ya que el acusado envió mensajes a la hija de la víctima diciéndole que su padre ya estaba “bien tostado para comérselo con ajo y aceite”

“Si no vuelves conmigo mataré a todos los miembros de tu familia, empezando por tu padre”. Este es el mensaje que el acusado envió a su ex pareja, la noche antes de que la víctima, de 58 años, apareciera calcinada en el interior de la pequeña casa ubicada en una zona rural entre Santa Perpètua de Mogoda y La Llagosta, donde vivia. La joven y el presunto asesino habían mantenido una relación durante casi un año, en el que ella había sufrido reiterados maltratos físicos y psicológicos. Aunque la mujer no denunció las agresiones, un juzgado de Sabadell investigó los hechos después de que requiere atención médica debido a las lesiones en más de una ocasión. En el momento en que la joven, de 24 años, habría tomado la decisión de poner punto y final a esta situación, el hombre habría cumplido con sus amenazas y, acompañado por dos amigos, la noche del 12 de enero de 2018, habría desplazado hasta el inmueble donde dormía el padre de su ex pareja y habría prendido fuego.

Según el abogado de la defensa, Álex Zaragüeta, él y otro amigo habrían lanzado un trapo en llamas en el interior de la casa y habrían puesto un acelerador para que el fuego se propagara más rápidamente. “Esa noche no le dijeron nada más a la chica, pero al día siguiente sí le enviaron mensajes y le dijeron que ya tenía su padre bien tostado para comérselo con ajo y aceite”, comentó. de hecho, según el abogado, los tres hombres habrían enviado numerosos mensajes escritos y de voz a la chica, “narrándolas le los hechos”.

Estas comunicaciones, asegura Zaragüeta, son “pruebas clave” para demostrar la autoría del crimen por parte de los acusados. Zaragueta ha hablado de todo ello después de que este lunes la mujer haya vuelto a comparecer ante el juez de Sabadell que instruye el caso para ratificar su versión de los hechos y a la vez aportar algunos datos nuevos.

“Tras la muerte de su padre ella mantuvo contacto con el acusado para sacarle información y ayudar a los Mossos en su investigación”, comenta el letrado que apunta que añadirán algunas cartas como prueba de que hasta ahora no habían entregado. El abogado explicó que tanto la defensa como la fiscalía pedirán transformar este procedimiento para que intervenga un jurado popular. El abogado asegura que se trata de un caso de “asesinato” y no de un homicidio, porque el presunto autor de los hechos actuó “de noche, mientras la víctima dormía y con alevosía, sin darle ninguna opción de defenderse “. Asimismo, recordó que hay un procedimiento paralelo que también está en fase de instrucción en Sabadell relacionado con los malos tratos que la joven sufrió a manos del presunto asesino.

“Pediremos que este procedimiento se aporte como prueba en el caso de asesinato”, comentó Zaragüeta que se ha mostrado convencido de que las diligencias finalizarán en poco tiempo. Asimismo, explicó que también han solicitado un informe forense del estado piscològic de la mujer para demostrar que estaba “totalmente subyugada” por su pareja.