Mossos de la Unidad de investigación y del grupo de delincuencia urbana de la comisaría de Mollet del Vallés detuvieron el jueves 18 de enero los miembros de un grupo criminal especializado en el tráfico de drogas. El grupo estaba formado por seis hombres de nacionalidad marroquí y vecinos de Montmeló, dos de ellos eran los líderes del grupo y ya contaban con varios antecedentes por delitos de robos con violencia. Los detenidos pasaron a disposición judicial el 19 de enero y el juez decretó prisión provisional sin fianza para los dos jefes del grupo criminal.
La investigación, que se desarrolló entre los meses de septiembre de 2017 y enero de 2018, se desarrolló en dos fases. En una primera fase, los agentes comprobaron que el grupo criminal venía y distribuía la droga a pie de calle, en el mismo centro de la población de Montmeló. Los investigados también hacían las ventas previo pedido, y se desplazaban en vehículo hasta el lugar acordado con el comprador para hacer la venta. Estos desplazamientos les permitían ampliar el ámbito de venta hasta Parets del Vallès.
Durante la investigación se comprobó que había compradores que adquirían las drogas en un piso del barrio de la iglesia de Montmeló. En este domicilio vivían los miembros del grupo criminal y lo utilizaban también como un punto de venta de la cocaína.
La segunda fase de la investigación se inició cuando, con toda la información recogida gracias a los informes de los agentes de policía, el juzgado número 3 de Mollet del Vallés autorizó una entrada y registro en el piso investigado. El objetivo era desmantelar el punto de venta de droga, detener sus responsables y acumular más indicios criminales para acreditar el tráfico de drogas.
Los agentes localizaron un total de 51 gramos de cocaína, así como algunas dosis de hachís y de marihuana. La mayoría de la cocaína intervenida se encontraba en roca para cortar, aunque también se localizaron mono dosis ya cortadas y preparadas para su venta final. La droga decomisada hubiera superado los 3.000 euros en el mercado ilícito.
En el piso había más de 4.000 euros, utensilios de pesaje de precisión y los agentes localizaron una de las líneas telefónicas utilizadas por el grupo para recibir pedidos y consumar las ventas.
De los seis miembros que conformaban el grupo, dos se dieron a la fuga y tienen una orden de búsqueda en vigor, dos más, que hacían ventas en la calle, fueron localizados y denunciados y los dos jefes del grupo criminal, que organizaban toda la actividad y también traficaban, fueron detenidos.
