
Dicen que lo impresentable
es la ley electoral:
la de dos y dos son cuatro
y más dos que suman seis.
Uno solo suma cinco,
pero, pierde ante el seis.
Se pierde frene a tres,
que sumando sus miserias
se imponen al ganador
ganado al cinco, con seis;
pues la unión hace la fuerza,
aún siendo un mal proceder.
Es un insulto al votante
aún que legitimo és,
ya que el que suma cinco
ganando al que suma tres,
pierde ante los perdedores
por el “chanchullo de seis”
En ello hay gran desacuerdo
ante tan absurda ley;
pero no hay quién la cambie
¿y saben ustedes por qué?:
porque los tripartitos,
son el “chollo” de esa ley.
Francisco Barbachano