Una imagen de un robo captada por los Mossos

Mossos de la Unidad Operativa de Movilidad de la División de Transportes han desarticulado una organización criminal que hurtaba a turistas en las áreas de servicio de la AP-7, entre ellas las existentes en el Vallès Oriental. Los cuatro detenidos, de origen albano-kosovar, sustraían objetos de valor y dinero del interior de vehículos tras distraer sus ocupantes a los que les decían que tenían la rueda pinchada y simulaban que los ayudaban.Los Mossos los detuvieron, el pasado 1 de juliol cuando accedían a la autopista para delinquir y el juez ordenó un registro y entrada judicial en el domicilio del jefe de la organización, donde se localizaron dinero y diversa documentación.

Su multirreincidencia en la comisión reiterada de este tipo de delito ha comportado que, por primer vez, el juez haya dictado una orden de alejamiento de 300 metros de la AP-7 en toda Cataluña para los integrantes de este grupo. Por lo tanto, se les prohíbe el acceso a esta autopista y evita que continúen delinquiendo. Es la primera vez que un juez dicta una medida cautelar de estas características.

Aparte de la orden de alejamiento y la retirada de los pasaportes de los detenidos, se han iniciado gestiones con los juzgados europeos de donde viven las víctimas para promover ruedas de reconocimiento virtuales y evitar que el caso acabe archivando. Los autores suelen robar personas extranjeras con lo cual se encuentran desorientadas, muchas veces no hablan el idioma y suelen llevar grandes cantidades de dinero.

La organización desarticulada era muy itinerante ya que aprovechaba la temporada de verano en los que hay una mayor afluencia de personas extranjeras en las autopistas para actuar. Posteriormente, y para evitar que la policía los detenga abandonan el país durante un tiempo y siguen actuando en otros países. De hecho, los cuatro detenidos, sólo uno de ellos tiene domicilio en nuestro país, mientras que el resto se alojaban de forma temporal en Cataluña durante el periodo que se organizaban para cometer los hurtos.

En la mayoría de casos el modus operandi utilizado por los autores es la modalidad de “pincharuedas”, que consiste en que los autores pinchan una rueda al vehículo de la víctima, posteriormente le siguen hasta que la víctima debe detenerse en el arcén, momento en que los autores también aprovechan para detenerse y sustraer los objetos del interior del vehículo. En otras ocasiones, y dado el grado de especialización adquirido, ya no necesitan pinchar la rueda del vehículo de las víctimas, simplemente una vez que han detectado el vehículo que quieren asaltar, lo hacen parar en el arcén o en la misma área de servicio o descanso de la autopista, haciendo indicaciones como si tuvieran un problema en el vehículo. Una vez parados y con la excusa de prestar auxilio, los autores distraen las víctimas mientras aprovechan para sustraer los objetos del interior del vehículo.

El detenidos, que tienen varios antecedentes en diferentes países de Europa como Francia, Alemania e Italia, alquilaban vehículos para cometer los hurtos. Los investigadores han podido implicarlos en seis hechos cometidos en 20 días en los que habrían obtenido más de 5000 euros, además de sustraer objetos de valor, tales como cámaras, teléfonos móviles, tabletas electrónicas y / o ordenadores. Los investigadores no descartan que estén implicados en más hechos ya que el grupo actuaba diariamente en la autopista.